ÉRASE UNA VEZ QUE SE ERA...
que la palabra dejó de ser tinta
para ser revoloteo
en la yema de los dedos...

Y las letras fueron hiedras;
frondosas lianas tocando el cielo.
Fueron primavera floreciendo;

... y apareciste tú...
tú,
que ahora nos lees...

Y se enredaron nuestros verbos,
nuestros puntos y comas,
se engarzaron nuestras manos
cincelando sentires y cantos.

Entre líneas surcamos
corazón al mando; timón
de este barco...

©Ginebra Blonde

lunes, 30 de septiembre de 2024

Inteligencia artificial


 

(Autor: ©Buscador)

NigthCafé- @palebluedot

Sus deseos eran codicia por ser mejor en todo pero en realidad era bastante mediocre. Soñaba con alcanzar el poder de la seguridad; profundizar en su mente y encontrar la sabiduría para ser mejor que nadie pero, todo eran descalabros. Los complejos se la comían por dentro por ser la última de la fila...Ya tenía 18 años pero sus pensamientos se convertían una maquinaria aplastante y seria por verse como una reina de la inteligencia.

Una noche de discoteca y de botellón supo del alcohol. La sensación era bastante agradable y pudo experimentar nuevas sensaciones como si su efecto y consumición fueran la piedra filosofal a sus sueños... De esa manera bebía habitualmente para coger ese punto donde la magia de su mente se ponía en acción. Llegaba a su casa borracha los sábados por la noche cada vez con más frecuencia...

Pasó un tiempo y le dieron a probar un porro de marihuana. Su efecto era verdaderamente maravilloso. Todo a su alrededor tomaba un nuevo significado en belleza; sus efectos la aislaban de toda la gente y a la vez vivía el momento con una felicidad inusual. En algún descuido su madre le encontró chocolate y papel de liar. Las discusiones en la familia eran continuas y sus nuevos amigos cada vez más y más sospechosos para sus padres pues venían de la marginación...

Llegó la oportunidad donde probó la cocaína. El poder de su mente se disparaba al mil por mil; era poderosa, genial, imbatible... maravillosa en todos los aspectos hasta que comenzó a robar a su familia para una nueva dosis.

Con el paso del tiempo más bien pronto que tarde se convirtió en adicta al alcohol y a la cocaína. Un gitano le dio a probar la heroína una noche. Se la inyectó poco a poco; bombeándole sangre al cerebro y después la violó cada vez que ella lo requería hasta dejarla embarazada.

De esa manera por atracos y hurtos fue a parar a la cárcel de mujeres. Todo su mundo se desplomó cuando un terapeuta le informó del engaño de las drogas y ella, a punto de dar a luz, admitió que aquella inteligencia era artificial.

©Buscador

(Relato perteneciente a la propuesta de Variétés: “IA”)


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Gracias por tu visita y tu compañía... ©Gin

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