ÉRASE UNA VEZ QUE SE ERA...
que la palabra dejó de ser tinta
para ser revoloteo
en la yema de los dedos...

Y las letras fueron hiedras;
frondosas lianas tocando el cielo.
Fueron primavera floreciendo;

... y apareciste tú...
tú,
que ahora nos lees...

Y se enredaron nuestros verbos,
nuestros puntos y comas,
se engarzaron nuestras manos
cincelando sentires y cantos.

Entre líneas surcamos
corazón al mando; timón
de este barco...

©Ginebra Blonde

jueves, 31 de diciembre de 2020

 

(Autora: ©Maite Lorenzo)

Diciembre 2020
 
Querida amiga:
 
Espero y deseo que al recibo de esta carta te encuentres perfectamente de salud, tan necesaria y solícita en esta época de pandemia que nos ha tocado vivir.
 
Yo estoy bien, gracias a Dios. He decido dedicarte  unas breves líneas con esta gastada y desvencijada máquina de escribir, tan  vieja y destartalada como la que te escribe.
 
Querida amiga, el tiempo se me escapa de las manos, tan rápido o tan despacio como mide el tiempo un reloj de arena. Los dados ya están echados y es mi deseo retomar nuestra antigua y añorada amistad antes que los recuerdos se borren de mi memoria, que no de mi corazón.
 
Acabo de encontrar guardado en una preciosa sombrerera el origen de nuestra disputa y alejamiento. Qué terquedad y miseria la mía, empeñarme en quedarme con ese espectacular original y vistoso sombrero; único cuando lo vimos. Qué obstinación la mía, pensé que luciría preferiblemente sobre mi cabeza, y que complementaría mi indumentaria mejor para aquella fiesta. Fatídica fiesta en la que mi vanidad rompió los lazos de nuestra leal camaradería. Mi querida amiga. El sombrero no me parece tan bonito y sugerente; reconozco que te hubiera quedado perfectamente ti.
 
Sí, ya sé que he podido coger el teléfono y llamarte y hablar contigo. Han pasado tantos años, hemos vivido tanto, sabiendo la una de la otra por otras personas. Pero he preferido utilizar estas sinceras letras para desearte lo suficiente y sobre todo para pedirte perdón, para decirte que siento mucho que te hayas quedado sola, tan sola y desvalida como yo.
 
Sí, te deseo lo mejor para estas fiestas navideñas, en las que la soledad será nuestra mejor compañía. ¿Te acuerdas de  lo bien qué pasábamos los días de Navidad? Nos conformábamos con tan poco, sólo deseábamos estar juntas en Nochebuena y Navidad. Qué bonitos recuerdos inundan y encienden mi corazón anciano ya. ¿Sabes cuál es mi deseo? Me gustaría volver a disfrutar unas nuevas navidades con mi mejor amiga.
 
Te remito la llave de mi hogar y de mi corazón con inmenso deseo de volver a verte.
 
Feliz Navidad
 
Con todo mi cariño
 
Tu amiga del alma
 

Texto perteneciente a la propuesta: "El Árbol De Los Deseos"


3 comentarios:

  1. Que bella reflexión nos has dejado, algunas veces nuestra terquedad nos aleja de esas personas que queremos y por un enfado dejamos su amistad. La Navidad como ha sido en tu proyecto ha sido una gran oportunidad para acercar posturas. Nunca dejemos ( aunque a veces nos cuesta ) que una tontería nos aleje de los amigos. Un abrazo, Feliz Año Nuevo .

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  2. Muy buen relato! me ha gustado mucho leerte!
    Un fuerte abrazo.

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  3. A veces nos ofuscamos y hacemos verdaderas tonterías, pero si dejamos a un lado el orgullo, todo tiene arreglo.

    Una carta con mucho sentido, me ha gustado mucho. Abrazos.

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Gracias por tu visita y tu compañía... ©Gin

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