(Autor: ©Chema)
Salí por la mañana a hacer las compras. Fui a la parafarmacia
a por dentífrico y *elixir* bucal. Allí estaba Dalila, una chica con la que he
llegado a hacer una bonita amistad. Me dio dos besos, como es habitual en ella.
Mientras otra compañera me cobraba, me dijo que iba a por unas muestras de
productos de belleza. Así que me quedé por allí esperándola. Sonaba de fondo la
canción ‘everything i do’. Ella *ama* la buena música, y creo que una vez me
comentó que le gustaba Bryan Adams.
Dalila tiene un hijo muy guapete. Tener pareja, *amarse* y
traer descendencia al mundo no es sólo patrimonio de la gente de la escuela de
ingenieros industriales, donde estudié. Lo digo porque mis compañer@s de la
escuela -en la época en que tenía contacto con ellos- armaban un jaleo cuando
se casaban y cuando tenían hijos, mandando mensajes a gente con la que no
habían cruzado palabra en años... Parece que era algo que habían inventado
ellos. Cuando se lo comento a mi madre, ella me responde irónicamente: “No
hijo, no, eso se inventó en la época de Adán y Eva”. Pues viendo a los
ingenieros, cualquiera diría que el jardín del *Edén* estaba donde hoy se
encuentra la escuela.
Mientras estaba sumido en estos pensamientos, llegó Dalila.
Me trajo unos sobres de loción para después del afeitado, y una muestra de
perfume con aroma a mandarina. ¡Mi *fruta* favorita! Le di las gracias un poco
abrumado, y ella le quitó importancia. Me dio de nuevo dos besos, y nos
despedimos hasta la próxima visita a la parafarmacia.
*Amo* a la gente simpática y generosa que te alegra el día,
como esta chica. Dentro de un mes será su cumpleaños. Tengo que pensar qué
puedo hacer para llevarle como regalo. ¿Una libreta personalizada, un retrato a
lápiz...? Algo se me ocurrirá.
Relato perteneciente a la propuesta: "Despeg(amo)s"
Es lindo lo que nos cuentas, y estoy contigo hay personas que nos alegran los días con sólo un gesto como es una sonrisa .
ResponderEliminarEspero que el regalo le guste, cuando algo se hace de corazón se nota.
Abrazos y felicidades.
Muy bonito tu relato Chema.
ResponderEliminarBien traída la propuesta del reto!
Un saludo.
Chema, amigo mío... te conozco y sé que con lo detallista que eres, tendrás el regalo idóneo para ella. Me ha encantado y me ha hecho reír... desde luego... ay, tu madre.
ResponderEliminarTe felicito, solete.
Mil besitos con cariño y muy feliz finde.
Me has hecho reir, Chema. Además de que la ironía me chifla.
ResponderEliminarY conociéndote encontrarás el regalo perfecto para ella y no dudes que ella pensará lo mismo que tú, que es un gusto encontrarse con gente simpática que te alegra el dia.
Genial!
Besos.
Esa Dalila, en su para-farmacia, será la musa de lo que tarareará el tipo mientras se aplica la loción, seguro.
ResponderEliminarMucho chulo. Un abrazo para ambos
Ese punto tuyo de ironía siempre cala. Esta Dalia y sus cosas... No sé yo...
ResponderEliminarUn beso muy grande.
Hay gente que con solo mirarla nos alegra el alma y me temo que Dalila es de las que inyectan felicidad en vena. Me gustó mucho el relato.
ResponderEliminarUn saludo.
Tú siempre tan detallista.
ResponderEliminarMe encantó que en tu relato salieran a relucir esas amables personas que con sólo darte los buenos días con una sonrisa, te alegran las 24 horas restantes.
Besos
Te lo voy a repetir, loque te dije en "Varietés", que me gustó que pusieras en valor, en tu relato, esas buenas gentes que alegran los días.
ResponderEliminarUn abrazo