(Autor: ©Julio Alcalá)
Ya me sueño
muriendo lentamente,
vestido con
la blanca y pura nieve
de cada
nuevo ser con cuerpo frío,
y pierdo la
consciencia de quien era.
Ya me veo
sabiendo entre vapores:
cómo era de
animal apasionado,
cuánto era
de demente por la vida,
vuelto ahora
tan cuerdo como muerto.
Ya comprendo
por qué fingen las caras
de aquellos
tan felices por vivir
ignorando al
poeta que decía:
cuán gran
muerte es la vida ya vivida.
Al morir
comprendí bien que escuchar
las verdades
del Ángel, es terrible.
©JulioAlcalá
(Poema
perteneciente a la propuesta
de Variétés:
“Deseos”)
Una bella poesía de emociones y sentimientos.
ResponderEliminarUn feliz año.
Saludos
Un excelente poema, duro y sensible a la vez...
ResponderEliminarMe gustó mucho!
Un saludo.
Hola Julio, tu estrofa, "ya comprendo por qué fingen las caras
ResponderEliminarde aquellos tan felices por vivir" me impactó. Sin duda emotivo y precioso. Un abrazo