(Autor: ©Chema)
Dejé de odiarme y comencé a vivir.
Cuando era más joven, había momentos en que odiaba haber
nacido hombre. Lo cierto es que tengo el tipo de carácter introvertido / intuitivo
/ sentimental / perceptivo (infp) en la clasificación de Myers-Briggs, y es un tipo
que abunda más en mujeres que en hombres.
Un día estaba hablando con una amiga sobre una cosa que me
pasó, y ella me preguntó: “¿cómo te sentiste?”. Una pregunta muy normal, pero a
mí me llamó la atención. Pensé: “¡vaya, qué bien, hay alguien que considera que
los hombres también sentimos cosas!”.
Desde entonces, me di cuenta de que tener un carácter en el
que primaban las emociones y las corazonadas, no era razón para sentirme
atrapado en un cuerpo que supuestamente no me correspondía. Así que dejé de odiarme y comencé a vivir.
(Relato perteneciente a la propuesta: “Odio”)
La sensibilidad en el hombre es una gran virtud aunque a veces se convierte para vosotros en un defecto lo cual no estoy nada de acuerdo. Muy bien por esa decisión que tomaste y acertada. Un besazo Chema.
ResponderEliminarChema, yo que he tenido la suerte de compartir contigo charla y café, solo puedo decir que eres una persona maravillosa y que si abundara más gente como tú... el mundo sería un lugar mejor. Gracias por ser así, no cambies, te lo prohibo :)
ResponderEliminarMil besitos llenos de cariño, solete y feliz abril ♥
Excelente relato Chema.
ResponderEliminarMe ha emocionado!
Un abrazo.
La verdad es que pensamos que los hombres tienen meno poder a la hora de sentir y emocionarse que las mujeres, pero en todo pensamiento generalizado existe la excepción.
ResponderEliminarGeneralizar no es bueno.
ResponderEliminarMe alegro y te felicito.
Bello relato.
Un saludo.